Para la construcción de Estructuras con materiales compuestos existen dos tipos de arquitecturas: las “Monolíticas” (apilado de capas), y las “Sandwich” que aumentan la rigidez al aumentar el espesor de la estructura, sin aumentar el peso de manera excesiva.
Una Estructura Sandwich, se obtiene uniendo dos láminas delgadas de alta resistencia (pieles), y un núcleo de bajas características mecánicas, que pude aumentar su resistencia 37 veces, aumentando el peso solo en un 6%. Pueden ser construidas con una gran variedad de formas y diversos materiales, pero la mayoría de ellos empleados en construcciones aeronáuticas y automovilísticas; estas estructuras están fabricadas con láminas de material compuesto de fibra de carbono o fibra de vidrio, que forman las caras que se unen al núcleo.
Los materiales compuestos de base termoplástica permiten su sobreinyección, obteniendo componentes híbridos mediante la unión química del material compuesto y la estructura sobreinyectada, debido al uso de una misma matriz polimérica (100% reciclables), estos materiales compuestos ofrecen a los ingenieros el aprovechamiento de las ventajas de los termoplásticos en su ciclo de moldeo (nervios, clips de fijación, RPS, soldaduras,...).